Final Fantasy XVI es uno de los juegos más esperados del año, para los jugadores da la sensación de estar jugando a una de las mejores aventuras del mercado. Nuestras primeras horas han sido intensas, hasta el punto de estar haciendo las labores diarias con el cuerpo, pero tener la mente en el mundo de Valisthea.
Lo primero de lo que podemos hablar es de la historia, una mezcla de Final Fantasy con Juego de Tronos, uno de los últimos fenómenos culturales que hemos vivido, que nos atrapa casi desde el primer minuto. Las cinemáticas son épicas y muy vistosas, aunque la opción de los anillos que nos permiten autoesquivar, curar y golpear rompen demasiado la experiencia del juego, así que recomendamos NO usarlos en una primera partida.
Gráficamente el juego es bueno, aunque sí que se notan que algunas animaciones podrían estar mucho mejor cuidadas; aunque esto no afecta mucho a la experiencia de juego. sí que hay momentos en el que se ven algunos movimientos extraños. En cuanto al rendimiento, en modo calidad el juego no tiene bajones y mantiene un nivel brutal, aunque particularmente recomendaría el modo rendimiento porque los 60 FPS se notan muchísimo en los combates.
Una de las cosas más espectaculares del juego en sus tráiler son los eikones, las invocaciones de toda la vida de la franquicia. Dentro del juego, hay algunas personas que son llamadas portadores, son gente que ha recibido el don de un eikon y puedes manejar magia de su elemento. Entre los portadores, hay algunos elegidos que pueden transformarse en el eikon del que han recibido la bendición; este el es caso de Clive Rosfiled, el protagonista de esta historia.
Podemos confirmar que durante el juego podremos manejar a estas invocaciones en unos combates espectaculares; sinceramente esta me parece una de las mejores maneras que han tenido en Square Enix de llevar las invocaciones en muchas entregas. Tienen un peso importante en la historia y lore del mundo, y además se muestran espectacular en sus combates.
Aunque haya unas zonas que permitan la exploración, Final Fantasy XVI se parece más a Dragon Age que a lo visto en Final Fantasy XV. Tendremos diferentes zonas para explorar, realizar misiones secundarias o batidas de caza que nos permiten obtener experiencia para subir de nivel y conseguir nuevas habilidades o potenciar las que ya hemos desbloqueados.
En lo personal, después de 8 horas me he encontrado con una historia muy interesante, un rendimiento brutal, un combate bastante divertido y algún punto que no me ha terminado de gustar, pero que analizaré en profundidad en el análisis que esperamos poder sacar lo más pronto posible. Aunque, si después de estas primeras impresiones te quedas con ganas de más, en Percalandia tienes disponible Final Fantasy XVI y te llegará con Sugus.
